El pasado día 3 de octubre, y coincidiendo con la celebración de San Francisco de Borja, Patrono de la Cetrería, organizamos desde la residencia de Albaladejito una actividad del proyecto “Volando por la naturaleza” con el que la Federación de Caza de Castilla-La Mancha pretende llevar a los centros educativos interesados una acción de educación ambiental diseñada para dar a conocer la cetrería.

Antes que nada, queremos dar las gracias a Samuel Fernández Blanco (Directordel CIFP Nº1 de Cuenca) que dentro de la vorágine del comienzo de curso pudo sacar tiempo para presentar la actividad y darnos su apoyo y a Victoria y Jesús, que contribuyeron para que la actividad pudiera llevarse a cabo.

Comenzamos con la presentación de Adolfo Ruiz, cetrero, artesano y divulgador con una dilatada experiencia en el manejo de aves rapaces y en la fabricación de aparejos de cetrería. A partir de ahí, Adolfo tomó la palabra y comenzó a dar unas pinceladas sobre la historia de la cetrería, plagadas de anécdotas curiosísimas que indican la importancia que las rapaces usadas en cetrería han tenido a lo largo de la historia. A continuación, explicó conceptos básicos de la biología de las aves rapaces, de su comportamiento y de su importancia en los ecosistemas como agentes reguladores de presas evitando plagas y epidemias. Debemos hacer mención especial a la información que nos dio sobre tenencia responsable de aves y de la ética de la caza. Durante la charla pudimos disfrutar de la majestuosidad de los halcones Cromo y Doncel.

 

Después de la charla se produjo un interesante debate y una buena serie de preguntas que por motivos de tiempo debieron interrumpirse, puesto que nos dirigimos a la zona habilitada para realizar unos pequeños vuelos de exhibición que fueron de gran interés para los participantes. Allí conocimos, entre otros, a Eleven y Felisona, otros de los halcones utilizados.

 

Después de disfrutar de la comida del equipo de cocina de la residencia de Albaladejito, comandado por Carolina, Adolfo nos deleitó con otra charla magistral sobre cetrería que realmente nos impresionó. Junto con Kevin Paños, voló a un impresionante azor, Zar, que no pudo salir por la mañana puesto que el gran número de participantes no lo hacía seguro. A continuación, los chicos y chicas de la residencia pudieron disfrutar de los vuelos al puño del Harris, Kratos. En sus caras de alegría se veía el reflejo de la fuerza y corazón de estas impresionantes aves rapaces y entendimos el motivo del próximo

proyecto de Adolfo para utilizarlas como ayuda con personas maltratadas.